Es curioso lo que puede hacer la imaginación de los niños. En el pasado Open Gavarcarp, del que os hablábamos ayer, el chavalín se entretuvo capturando basses con un señuelo fabricado por él mismo.
Su padre estaba participando en el Open, y como había que matar el tiempo, ¡qué mejor manera que hacerlo pescando! Había visto movimiento de peces entre las hierbas de la orilla, y se echo manos a la obra para realizar el curioso señuelo que veis en la foto.
¡Y funcionó! Capturó un montón de blasecillos, que luego devolvió al agua.
Quien sabe si este modelo de señuelo lo vemos dentro de unos años en el mercado…