Esta foto es del año 96, por aquel entonces pescaba más depredadores que carpas. Decidimos ir a Ruidera porque habíamos hecho una visita previamente y vimos muchas carpas y barbos. Pescamos allí durante 3 días. Yo estaba recién empezado en el carpfishing, con mis cañas Browning y unas alarmas CarpSounder muy básicas. Tuvimos la suerte de sacar varios peces, que fueron mis primeros en este escenario.
Teníamos un método: con una barca dábamos la vuelta a la laguna y cuando veíamos movimiento en el carrizo porque las carpas se metían en ellos, las localizábamos y sabíamos donde pescarlas. Habíamos conocido allí a Pepe, que llevaba el club náutico de la Colgada. Había una casa pegada a la laguna con una chimenea, que Pepe nos encendía y pasábamos la noche a su lado con las alarmas subidas a tope para escucharlas. ¡Lo pasamos muy bien!
Después de esta experiencia empecé a motivarme fuerte con el carpfishing. Probamos más lagunas, el embalse de Peñarroya, y luego ya el Tajo, Entrepeñas, Buendía, etc. En aquella época cebábamos con boilies y pescábamos con maíz.
¡Podéis ver que yo estaba muy verde aún y que no sabía ni coger el pez!